Mañana de Viernes

Ahí no puedes estaaaaaaaaaaaaaaar! A buscarse otro sitio!

PhoBiaS

Cuntis

Terraceando con Ron

Sintra

La villa de Sintra, Patrimonio Mundial de la Humanidad desde 1995, está a unos 28 kilómetros de Lisboa y se encuentra en una sierra salpicada por iglesias, palacios, monumentos y fincas señoriales.

Vistas a la villa desde el Palacio Real con el Castillos dos Mouros al fondo (VIII)

En el centro de la Villa se encuentra el Palacio Real. En una curiosa mezcla de estilos arquitectónicos, destacan sus características chimeneas cónicas, que son estandarte de la Villa. Este palacio fue construído sobre las ruinas de un castillo moro en el siglo XV.

Tras darnos un paseíto por el casco urbano empezamos a subir y a subir...Monte arriba íbamos dejando atrás "casitas de pobres" hasta llegar al Castillo de los Moros, pero decidimos subir más para llegar al Palacio da Pena.

El Palacio da Pena, está considerado como máximo ejemplar de la arquitectura romántica portuguesa. Fue edificado a 500 metros de altitud en el año 1890 sobre las ruinas de un antiguo convento de frailes y está rodeado de un enorme parque inglés. Con todo esto, normal que fuese elegido por la monarquía como residencia de verano.

La Baixa y Rossio

Una zona importante del centro de Lisboa es la parte baja (Baixa). Es un tablero de ajedrez plano de calles, muchas de ellas peatonales. La Baixa, entre la Plaza del Comercio (una pena de fotos porque estaba en obras) y el Rossio, fue reconstruída después del terremoto de 1755 en el estilo clasicista de las postrimetrías del siglo XVII.

Puerta de la Plaza del Comercio

Detalle de la puerta por el lado que da al Tajo

Plaza del Municipio

En el Rossio se encuentra el Elevador de Santa Justa (1902) de estilo neogótico y une el Barrio de la Baixa con el de Chiado y es el único vertical de la ciudad.

La Plaza del Rossio ha sido desde tiempos medievales el centro neurálgico de la Baixa. Rodeada de comercios, restaurantes y hoteles, algunas de sus tiendas y cafés datan del siglo XVIII, ya que hubo de reconstruirse tras el terremoto.

Teatro Nacional de Doña María II

Detalle de la estatua de Pedro IV

Al comienzo de la Avenida de la Liberdade se encuentra la Plaza de Restauradores, que al contrario que la Plaza de Rossio es una sencilla plaza de forma rectangular con tráfico de coches constante, donde toda su ornamentación reside en el gran obelisco central que conmemora la independencia de Portugal frente a España en 1640, luego de sesenta años de dominación.

Al final de la Avenida se encuentra la plaza en honor del Marqués de Pombal, que reconstruyó la ciudad tras el terremoto.

Tras esta plaza, está el parque de Eduardo VII, al que nos dirigimos para visitar las estufas, pero, oh que pena, estarán cerradas hasta Febrero del año que viene.

Alfama

Hoy toca ver alguna foto del paseo matutino que nos dimos por el barrio de la Alfama. Su nombre, igual que el barrio, es de origen árabe ("al-hamma", que significa baños o fuentes) y está coronado por el Castillo de San Jorge.

Vista desde lo alto de la Alfama al Castillo y al barrio

Vistas a las ruinas del Carmen

Tras la Reconquista, pasó a ser zona de pescadores y hoy por hoy, es una de esas zonas humildes tan típicas de postal, con casitas pequeñas y ropa tendida en las ventanas.

Intramuros del Castillo de San Jorge

;PPPP

Como era Martes, coincidimos con el Mercado da Ladra (tooodo cosas usadas) y ayudé, cual british, a expoliar el Patrimonio Nacional, comprándome unos azulejos modernistas de 1890 (o eso me dijeron).

Y ahora alguna foto de las iglesias:

Iglesia-Monasterio de Sao Vicente de Fora

La Iglesia de Santa Engracia, ahora Panteón Nacional.

Salazar decretó que la Iglesia de Santa Engracia se utilizara como Panteón Nacional, y su interior guarda los restos de presidentes de Portugal, de escritores además de los de la famosa Amalia Rodrigues.

Por último, la Catedral de Lisboa, Santa María Maior, que es la edificación más antigua de la ciudad (1147), de estilo románico y desde su construcción ha ido acumulando distintas reformas.

Lisboa, A Las Orillas Del Tajo

La visita a Belem la verdad es que fue muy agradable, supongo que la buena compañía de Ele, Cris y Carlos, ayudó a que el calor fuese más soportable y no lo digo sólo por el aire acondicionado del coche, que también ;P (si llegamos a hacernos el paseito que teníamos previsto desde el centro de la ciudad andando, creo que aún seguiría en cuidados intensivos debido a la insolación).

La Torre de Belem (1515) es un claro ejemplo del típico estilo manuelino lisboeta, que por lo que he leído por ahí, en su momento sirvió como centro de recaudación de impuestos para poder entrar a la ciudad.

En Belem también está el Monumento de los Descubrimientos, construído en 1960 para conmemorar el 500 aniversario de la muerte de Enrique el Navegante. La verdad, es que personalmente me pareció bastante feuco, pero aún así os dejo este par de fotos.

Decir, que según las guías turísticas, es imprescindible probar antes de irse uno de los famosos pastelillos de nata (marca registrada of course!). Y tod@s lo hicimos como buen@s guiris sin demasiado esfuerzo.

Despues de retomar fuerzas y pelearnos por quien se tomaba el último pastel nos fuimos al Monasterio de los Jerónimos. Este monasterio, también de estilo manuelino, aunque en su interior hay elementos renacentistas, se comenzó a construir en 1502 y no se terminó hasta 70 años más tarde.

Si el monasterio ya impacta por fuera, la verdad es que por dentro impresiona más. Dentro del entramado de naves decoradas con un abigarrado estilo manuelino, se encuentra la capilla mayor de estilo renacentista. Para ver su claustro (de dos pisos) hay que pagar y la verdad es que mientras escribo me estoy arrepintiendo de no haberlo hecho, pero bueno, tocaban otras visitas.

En el interior están enterrados reyes, personajes como Vasco De Gama (el monasterio se erigió para conmemorar su regreso de la India) y poetas como Pessoa y Camoes (foto).